martes, 3 de noviembre de 2009

39. TODO LO QUE PODAMOS HACER POR NUESTROS HIJOS ES POCO


Nosotros somos una familia con tres hijas, Lucía (8 años), Claudia (7 años ) y Marta (6 años). Acudimos a INPA en junio de 2008 porque Lucía tenía problemas graves de atención, detectados cuando hacía 1ª de Primaria.

Llegamos al Centro con gran preocupación por nuestra hija y nos encontramos con unos profesionales que te hablan con gran claridad de los problemas que existen pero también te dan un gran cariño, atención y esperanza. Desde el primer momento nos hablaron del método PADOVAN y de las mejoras que el citado método conseguía, comenzando inmediatamente con el mismo.

Además, a Lucía le detectaron problemas auditivos, que nadie hasta la fecha nos había indicado, siguiendo desde ese momento distintas terapias que han conseguido importantes mejoras en su audición.

Aunque el camino no es fácil y hay que tener gran constancia en la ejecución de los ejercicios podemos decirte que nuestra hija ha mejorado considerablemente .

Por otro lado, Claudia (nuestra hija mediana) comenzó con problemas de bruxismo en enero de 2009. Como la confianza con INPA es total, hablamos con ellos para ver si lo podían tratar. Tras una primera sesión con ellos, vieron que ella era un caso diferente del de Lucía, ya que Claudia no tenía problemas de atención pero sí de nerviosismo que le habían llevado a morderse las uñas y a apretar las mandíbulas hasta el punto de tener una contractura en el cuello. Gracias a unos ejercicios mandibulares, de boca y dientes, a la par que PADOVAN (en días alternos), Claudia solucionó su problema, de hecho acabó el curso con todo sobresalientes y 2 notables.

Espero que nuestro trestimonio os sea útil, el camino es largo y todo lo que podamos hacer por nuestros hijos y por la familia es poco. Desde INPA tienen en cuenta todo esto y sólo podemos deciros que nuestra experiencia ha sido totalmente positiva, que siempre que hemos tenido alguna duda tanto Ignacio Calderón y Ana Álvarez como el resto del personal nos han atendido y respondido con gran cariño y diligencia.

Un cordial saludo,

Manuel y Belén (Madrid)